Desde hace varios años, en Barcelona ciudad se organizan reuniones periódicas de los Consells de Salut de los diferentes distritos de la ciudad. En estas reuniones, representantes de los ciudadanos, profesionales sanitarios del territorio (atención primaria, especialistas del sistema público, oficinas de farmacia) y la administración sanitaria local (en nuestro caso el Consorci Sanitari de Barcelona), se reúnen para tratar temas de salud, de recursos sanitarios y de medicamentos. En ellas se crean debates y mediante “el boca-oreja” se transmiten los puntos más chocantes o interesantes. Esta iniciativa comienza en 2009, con la pregunta de un ciudadano sobre los medicamentos y sobre su utilización y consumo. Tras la pregunta se invitó a la administración sanitaria para que abordase la información sobre uso racional de medicamentos dirigida a los ciudadanos.
Ante esta oportunidad, se valoró poner en marcha una iniciativa global, con el objetivo de sensibilizar a la población acerca de la importancia de una correcta y adecuada utilización de los medicamentos mediante una intervención educativa. Una iniciativa que permitía poner en práctica uno de los puntos estratégicos del Pla de Salut 2011-2015 de Cataluña. Además, nacía como complemento a las intervenciones que ya venían realizando los profesionales sanitarios desde sus consultas (médicos, enfermería, Pacient Expert) y desde las farmacias, más enfocadas a pacientes concretos y a patologías determinadas (actividades educativas dirigidas a pacientes polimedicados).
Antes de planificar el contenido de la intervención sanitaria, necesitábamos conocer las necesidades reales de información, las opiniones y las actitudes respecto al uso de medicamentos en la población general. Con este fin se llevó a cabo un estudio descriptivo transversal, semicuantitativo, en población de 18 o más años, asignada a centros de atención primaria del municipio de Barcelona. Se realizó un muestreo bietápico estratificado por barrio, sexo y edad. Se administró un cuestionario propio validado, de forma presencial en los centros de atención primaria. Para la elaboración del cuestionario se creó un grupo de trabajo formado por médicos, enfermeros, farmacéuticos y pacientes y se organizaron ocho grupos focales con pacientes para profundizar en los puntos a incorporar en el cuestionario.
El cuestionario incluyó los siguientes apartados: 1) datos personales; 2) conocimientos sobre la medicación actual que toma el encuestado; 3) conocimientos sobre medicamentos y su seguridad (definiciones de principio activo, contraindicación, efecto adverso e interacción medicamentosa y la capacidad de identificar el nombre del principio activo en la caja del medicamento) y 4) quince aspectos que permitían evaluar la opinión y actitud sobre el uso adecuado de medicamentos. Con las respuestas de este último apartado se elaboró un indicador con una escala de 0 a 10.
Se realizaron 484 encuestas durante el mes de diciembre de 2011. El 52,1% fueron mujeres y por grupos de edad, el 28% tenían entre 18 y 34 años, el 26% entre 35 y 49, el 22% entre 50 y 54 y el 24% tenían 65 años o más. El 21,3% indicó tener estudios universitarios. Los datos se analizaron con el programa estadístico SPSSv15. Se obtuvieron los siguientes resultados, que fueron presentados como comunicación oral en el XVII Congreso de SEFAP:
- El 81% de los encuestados había tomado medicamentos en los últimos tres meses, estando el 86% de ellos prescritos por un médico. La media de fármacos por persona fue de 1,9, cifra que aumenta con la edad. El 15% guarda dos o más envases de cada medicamento en su domicilio.
- Más del 80% de los encuestados que se medican saben indicar qué medicamentos toman y para qué, aunque en el 90% de casos no saben decir cuál es el nombre del principio activo. El nivel de estudios influye positivamente en un mejor conocimiento de los medicamentos, así como el hecho de ser más joven. En general, el nivel de conocimiento de conceptos técnicos relacionados con los medicamentos y su uso es bajo: más de la mitad (55,6%) no sabe definir el concepto de principio activo. El 35% reconoce el principio activo indicado en el envase del medicamento (en los tres ejemplos planteados). Mientras que el 44,5% no reconoce el principio activo en ninguno de los casos. El 22,7% conoce el significado de los términos contraindicación, efecto secundario adverso e interacción medicamentosa, mientras que el 20% tiene total desconocimiento, circunstancia que aumenta con la edad y disminuye con el mayor nivel de estudios.
- La opinión y actitud en relación al uso adecuado de medicamentos, en base los quince aspectos del último módulo del cuestionario, roza el aprobado (indicador global de 5,03 puntos sobre 10). La expectativa de recibir una prescripción de medicamentos en la consulta del médico, la recogida de nuevos envases en la oficina de farmacia aun teniendo en casa, su correcta conservación y reciclado son puntos débiles de la población encuestada.
- Con todos los datos se llevó a cabo una segmentación de la población participante. Se obtuvieron tres grupos de población. Grupo 1, formado por hombres, la mayoría extranjeros, con un promedio de edad de 41 años, estudios medio-bajos y bajo consumo de medicamentos; para este perfil el indicador global fue de 3,11 puntos. Grupo 2, formado por mujeres, la mayoría españolas, con un promedio de edad de 65,5 años, nivel educativo bajo y elevado consumo de medicamentos; su indicador global fue de 5,6 puntos. El último grupo está formado por mujeres españolas, con una media de 40 años con estudios universitarios y bajo consumo de medicamentos; el indicador global fue de 5,8 puntos.
- Para terminar, el cuestionario incluía una pregunta sobre la percepción que el encuestado tenía respecto a si hacía un uso adecuado de los medicamentos y sobre la sensibilización de la población. El 70% cree que no se hace un uso adecuado de medicamentos y el 21,3% cree que es necesaria una mayor concienciación social.
A raíz de los resultados de la encuesta constatamos que el nivel de conocimiento, las actitudes y las opiniones de los ciudadanos sobre los medicamentos no parecen suficientes para conseguir un uso adecuado de medicamentos, además la población encuestada estaba interesada en conocer más. Empleando los puntos claves extraídos de la encuesta se han elaborado mensajes dirigidos a los ciudadanos componiendo la campaña “Medicament 360: m’agrada saber el que prenc” (medicamentos 360: me gusta saber qué tomo). Se trata de trece vídeos de entre uno y tres minutos de duración. ¿Su objetivo? generar interés sobre el correcto manejo de los medicamentos y ofrecer respuestas clave para su uso adecuado y sostenible.
Actualmente estos vídeos se pueden ver en las pantallas de las salas de espera de los centros sanitarios (de atención primaria y de atención hospitalaria) de la ciudad y están integrados en las web corporativas del Departament de Salut y en YouTube. Como ejemplo, os dejamos el siguiente vídeo que aborda las interacciones medicamentosas:
[youtube=https://www.youtube.com/watch?v=upJVEhoSagg&w=560&h=315]
En paralelo, se están abordando nuevos canales de difusión para que el material elaborado pueda llegar a un mayor número de ciudadanos y se está preparando la evaluación de su impacto en la población.
Para más información sobre los resultados: Boletín e-farma de la Región Sanitaria de Barcelona, Nº 19, marzo de 2013.
Entrada elaborada por Rita Puig Soler
Els Consells de Salut son una gran iniciativa que deberiamos implementar en todo el territorio. En la misma línea pienso que integrar a la oficina de farmacia comunitaria en el equipo asistencial del ABS es una necesidad urgente. Saludos!
Gracias por tu comentario
Un saludo
¡¡Una iniciativa genial!! Totalmente de acuerdo, habría que implementarlo en todo el territorio, y no sólo difundir esos vídeos en la salas de atención primaria y hospitalaria, sino también en las farmacias comunitarias!
Ya se ha propuesto a los colegios de farmacéuticos y en Cataluña aquellas farmacias que lo desean pueden utilizarlos