En un mundo cada vez más digitalizado, los congresos ofrecen oportunidades únicas para la interacción cara a cara, el networking y el desarrollo profesional que no se pueden replicar completamente en entornos digitales, pues facilitan la construcción de relaciones más sólidas y duraderas que las interacciones virtuales
Estos encuentros, sin duda, además de fomentar el desarrollo individual, son un caldo de cultivo para la creatividad y la innovación, propiciando un entorno ideal para la generación de ideas y la resolución colaborativa de problemas.
Pero en este post no sólo queremos animaros a asistir al próximo congreso de la SEFAP 2025, sino que nos gustaría compartir algunas de las anécdotas acontecidas durante estos días en Girona.
Empezaremos por el martes 28 de mayo, día en que la Presidenta del Comité Organizador, que es muy precavida, subió al AVE en Barcelona dirección Girona; sin embargo, sin saberlo, su destino era Madrid (¡Se había puesto ya en marcha para el Congreso de 2025!).
Un miembro del Comité, en este caso del Científico, no se equivocó de destino, no; sino que desde las mismas vías de Atocha fue testigo de cómo el tren salía rumbo al congreso de Girona sin él. Lo perdió, ¡por tan solo un minuto! Seguimos…
En esos mismos instantes, la Vicepresidenta del Comité Organizador fue a la estación del AVE-Girona a recibir a unas congresistas-amigas. La emoción del reencuentro fue tal, que, entre abrazos y bienvenidas, cargaron el coche con maletas, bolsos y llaves dentro… Quedando al instante el coche bloqueado. Mientras esperaban a ser rescatadas por un apuesto galán con la segunda llave del coche… La espera fue amenizada por un pequeño percance con el propietario de un coche colindante. ¡Suerte que la policía local dictaminó la inocencia de la Vice!
Y continuamos con las anécdotas ferroviarias, ¡Incluso algún ponente nos confesó haberse dormido en el tren, despertándose en la siguiente estación (Figueres-Vilafant)! ¡Suerte que existen los taxis!
Dejando ya los trenes, entramos en el mundo del reenvasado; los farmacéuticos siempre recordamos la importancia de no reutilizar frascos ni reenvasar sustancias sin etiquetar… Pero no siempre damos ejemplo; ¡y es que en el Comité Científico se detectó un frasco de colonia relleno de agua de planchado fácil! (¿Adivináis quién fue?; seguro que os fijásteis en que alguien no tenía ni una arruga).
A lo largo del Congreso se perdieron (y recuperaron) móviles, gafas, jerséis, bolsas… e incluso zapatos. ¡En la cena de clausura, una de nuestras compañeras perdió sus tacones, transformándose en nuestra Cenicientfap por una noche!
No hemos hablado aún de medicamentos, ¿verdad? Pues el Congreso también tuvo sus repercusiones. El sábado por la mañana no solo el café cotizaba al alza, no… También la flecainida (aunque caducada) –¿por qué será?
En resumen, unos días llenos de experiencias y vivencias compartidas, mucho aprendizaje, y también deberes que nos llevamos a casa. ¡Como redactar el Manifiesto de Girona y tener muy presente aquella frase lapidaria de que si los FAP no hacemos nada nos picará el mosquito tigre, nos morderá la garrapata del Congo, y nos beberemos nuestras…!
Todo lo anterior es cierto, igual que lo es que esperamos que hayáis disfrutado del congreso tanto como lo hemos hecho nosotras. ¡Nos vemos en Madrid 2025!
PD: ¡Anotad en los comentarios del post las anécdotas que os ocurrieron durante el congreso!
Entrada elaborada por Àngels Pellicer Jacomet (Vicepresidenta del Comité Organizador del Congreso. FAP de la Unitat de Suport a la Prescripció DAP Girona) y Marta Turu Pedrola (Directora del Comité Editorial del Blog de la SEFAP)
La publicación de esta entrada se ha realizado con carácter personal y no tiene por qué representar la posición de la organización en la que desarrollan su actividad profesional.
Foto de portada: acto de bienvenida celebrado en el Pati de les Magnòlies, en Girona.
